Viajar por playas de dunas, acantilados, bosques y pueblos costeros que invitan a hacer un alto en el camino para, avistar ballenas jorobadas y francas australes o, darnos un baño con el gran tiburón blanco a escasos metros de nuestros ojos. Todo esto y más es lo que te brinda, un viaje a Sudáfrica.
Todos los países del mundo muestran una cierta diversidad, pero en Sudáfrica esta se hace aún más evidente. Este país es un destino ideal para un enorme abanico de opciones de viaje de diferentes características. Desde viajes de lujo a vacaciones en familia pasando por los viajes fly&drive, turismo cultural, viajes de aventura, safaris, viajes de novios o viajar con niños. Su grandiosidad va desde los curiosos y grandes hipopótamos del río Limpopo hasta los pingüinos del Cabo. Realmente algo difícil de superar. Y todo esto debido a su posición privilegiada en el extremo sur del continente más épico del mundo y que le ha permitido tener un clima que se aleja de la división de estación húmeda y seca tan típica de los pueblos africanos.
Creemos que no hay mejor manera para conocer Sudáfrica que, viajando por la Garden Route. Un viaje desde la que sea probablemente la ciudad más bonita del continente, protegida por la Table Mountain y los campos de viñedos que permite que el país tenga una de las mayores producciones de vino del mundo, Cape Town, hasta Port Elizabeth, pasando por el mítico Cabo de Buena Esperanza (Cape of Good Hope) en un recorrido que convierte al viajero en un auténtico explorador de la naturaleza.
La Ruta Jardín (Reserva de la Biosfera por la Unesco en 2017) es un viaje por carretera de 750 kilómetros con el océano a nuestra derecha, en el que van apareciendo playas de dunas, acantilados, bosques, estuarios, pueblos y localidades costeras que invitan a hacer un alto en el camino para, avistar ballenas jorobadas y francas australes o darnos un baño con el gran tiburón blanco a escasos metros de nuestros ojos. Sea como sea la Ruta Jardín y Sudáfrica son una joya que hay que recorrer sin prisa para poder gozar de hasta cinco ecosistemas distintos que nos hacen disfrutar en un mismo país de, cebras y delfines.
Pero por si todo esto fuera poco, en Sudáfrica encontraremos uno de los parques nacionales que son buque insignia del continente. El parque nacional del Kruger y las reservas anexas son probablemente de los mejores lugares de África para disfrutar de safaris cortos pero intensos y con gran afluencia y proximidad de vida salvaje. Muy cerca de la zona del Kruger se localiza uno de los enclaves más apreciados por TERRES Llunyanes, el Blyde River Canyon, un espectáculo natural de obligada visita en cualquier viaje por Sudáfrica.