Un gigantesco país os espera en un viaje a China, un calidoscopio irrepetible donde todo es posible.
“Ahí yace un gigante dormido. ¡Déjenlo dormir! Porque cuando despierte, sacudirá el mundo”. Esta es la frase profética que dijo Napoleón sobre este inmenso país y tenía toda la razón. China, la civilización ininterrumpida más antigua del mundo, es hoy el gran gigante asiático, una potencia mundial fascinadora que atrae y enamora a los viajeros.
China no es un país, sino un mundo diferente, y es que es imposible hablar de un solo viaje a China. Sus tierras ofrecen tal infinidad de destinos y propuesta de viajes alternativos que ni con un año y paciencia ilimitada se podría decir “China ya la conozco y ya la he visitado”.
Desde TERRES Llunyanes como agencia de viajes alternativos y aventura con más de veinte años de experiencia sabemos que descubrir China puede resultar abrumador, pero como especialistas en el destino disponemos de una gran variedad de viajes a medida y viajes en grupo reducido que os llevarán a conocer des de las rutas más clásicas y tradicionales a otras más aventureras por lugares poco visitados.
Todo aquél que imagina este país ve, sin dudarlo, la Gran Muralla china, el icono más fotografiado y esperado por todos los viajeros y no es de extrañar. Con una cultura única y milenaria que ha dejado huella en su territorio, la historia de China es una de las más apasionantes del mundo. En Pekín, los adoquines de la Plaza de Tiananmén todavía resuenan los misterios de la Ciudad Prohibida. Mientras que en Xi’an los Guerreros de Terracota nos transportan a la época de las grandes dinastías y sus emperadores.
Pero más allá de su monumental pasado el país también cuenta con infinidad de maravillas naturales que esperan ser visitadas. Espectaculares arrozales os esperan en Longsheng y canoas de bambú en el río Li. Aunque puede que sea en el Parque Nacional de Zhangjiajie, con sus montañas flotantes que trasladan a la mágica tierra de la película Avatar, lo que más os sorprenderá. No podemos olvidar tampoco los Osos pandas gigantes de Chengdu o los bucólicos paisajes que nos ofrece el río Yangtze.
Otra China espera a los que quieran vivir una gran aventura y es que en sus infinitas tierras encontramos lugares remotos, poco visitados y perfectos para practicar el slow tourism. En la región de Amdo, a los pies de las montañas sagradas, las leyendas del pueblo nómada nos hablan de una tierra de mitos pintados en coloridos thangkas, una auténtica Experiencia en el Tíbet Nómada. En los albores de la cordillera del Himalaya, Yunnan la “región del sur de las nubes», obsequia a los visitantes con paisajes de gran belleza salpicados por pintorescos y tradicionales pueblos que hablan del Shangri-La. A la vez, alberga a la mayor proporción de minorías étnicas del país, una delicia para los amantes del turismo cultural.
El mundo del yin y del yan, un lugar de gigantescas extensiones, desiertos, cumbres sagradas, tradiciones, cuevas, ciudades imperiales, modernidad extrema…China es, sencillamente, otro mundo. Uno de los mejores lugares para viajar y un imprescindible para cualquier buen viajero.
